el día del abuelo

 ..mi abuelo tiene 102 años y no puede dormir en las noches, dice ke no concilia el sueño y ke tiene miedo de volverse loco por la falta de sueño.  Lee el periódico todos los dias en la mañana , luego del desayuno; acto seguido, ve los noticieros en la televisión, lee un libro, se lava las manos, almuerza y hace siesta. Se despierta, conversa con mi abuela, toma aire en el patio, ve televisión y cena algo ligero, ve el noticiero nocturno y se va a la cama a las 10 pm.

..mi abuelo no se da cuenta, o le cuesta creer ke entre actividad y actividad, cierra los ojos y ronca.. ronca tan fuerte como una pantera dándose a notar en el boske; no kiere creer ke sus pekeñas siestas duran entre 5 y 30 minutos y si las sumamos pues nos dan más de 8 horas.  Sigue pensando ke desde el momento ke cierra los ojos hasta el momento ke los abre sólo ha pasado un pestañeo, el aleteo de un chilalo, un tic-toc del reloj de pared ke no tenemos, el maullido del gato ...una fracción de segundo.

..mi abuelo es un héroe, con 102 años a cuestas me cuenta sus hazañas de niñez, a los 12 años caminó durante 10 horas seguidas entre lluvias y quebradas, cuando se peleaba porke los chicos de la ciudad le decían "serrano!" en forma peyorativa, cuando lo hicieron caminar 50 kilómetros para darle un rango de Sargento Primero (y aún estaba en el colegio), cuando jugaba basket y pese a ser de baja estatura se luxó el pulgar al golpearlo contra el tablero, cuando casi lo fusilan durante el gobierno de Sanchez Cerro por simpatizar con los apristas y se salvó de milagro. El principal recuerdo ke tengo de él es cuando derrotó al cancer en 1983 y entregó a cambio el 75% de su estómago.

..mi abuelo come de todo, es una máquina en la mesa. Adora la comida de la sierra, le encanta el trigo, las habas, los frijoles, el mondonguito, el caldo de pichones ...pero sobre todas las cosas, saborea como un niño un buen plato de cuy frito; el año pasado se atoró con un microscópico pedazo de carne de pollo de granja ...y ni por eso ha dejado de comerlo.

..mi abuelo nunca leerá estas líneas; si lo hiciera, me agarraría a correazos por mis faltas de redacción. Gracias a él aprendí a amar los libros, a usar mi imaginación, a declamar, a apreciar la naturaleza y a no hacerme un lío por los problemas.

..mi abuelo es como yo nunca podré llegar a ser.